Reproducimos a continuación la declaración de firmas levantada por decenas de organizaciones y dirigentes sindicales, sociales y políticos frente a los ataques del gobierno, los despidos y suspensiones.
¡Nuestras familias van primero, ningún despido!
Llevamos menos de dos meses de pandemia en Chile, y los empresarios con el consentimiento del gobierno ya desataron un verdadero infierno para los trabajadores. La crisis sanitaria que tiene a todas las familias preocupadas y expuestas al virus, es vista como una oportunidad por el gran empresariado para que las y los trabajadores la paguemos con despidos, suspensiones y rebajas salariales.
Las últimas mediciones nos hablan de más de 300 mil despidos y 800 mil suspendidos (sólo si hablamos de trabajos formales). Más del 20% de los trabajadores formales, ya sufrieron despidos, suspensiones o rebajas salariales, en las primeras semanas de la pandemia. Mientras tanto, los empresarios advierten que la crisis se prolongará por dos trimestres más, por lo que planean continuar con los ataques.
La repartija de millones de dólares entre los accionistas de LATAM y CENCOSUD, volvió a mostrar el carácter miserable de estos empresarios amigos personales de Piñera. Chile es un país al servicio de los grandes empresarios, y esta terrible pandemia a revelado más claramente los intereses del gobierno, y su ligazón con los intereses de los grandes grupos económicos, y cómo buscan asegurar sus ganancias, por supuesto a costa de las grandes mayorías.
Mientras la CUT se mantiene en cuarentena, oficiando de observador privilegiado de este ataque a la clase obrera, se empiezan a ver los primeros intentos de los trabajadores para romper el cerco impuesto por la pasividad de los grandes sindicatos y por los grandes medios de comunicación. Los portuarios de Iquique marcharon a pesar de las restricciones, los y las trabajadoras de la salud que pelean en la primera línea en todo el país, y se movilizaron en grandes hospitales como el Barros Luco y el Sótero del Río, o los sindicatos de SGS y Bureau Veritas que se unificaron para pelear contra los despidos. La juventud trabajadora es especialmente atacada como los trabajadores de las comidas rápidas que también se organizaron para levantar una campaña en común contra las suspensiones.
Para fortalecer estas peleas y desarrollarlas nacionalmente expandiéndose a otros sectores que quieran resistir los ataques, necesitamos poner en pie una coordinación nacional contra los despidos, las suspensiones y las rebajas salariales. La bronca se acumula entre millones de trabajadores que sufren los ataques día a día. Hay que seguir el ejemplo de los sindicatos que ya vienen peleando en conjunto frente a los despidos. Si queremos somos una fuerza imparable que se hizo evidente para todos en la rebelión popular con el paro más grande de las últimas décadas, el 12 de noviembre. Pongamos nuevamente a los trabajadores en primera línea sacando a la CUT de su sillón, para poner todas las fuerzas al servicio de pararle la mano a Piñera y sus empresarios amigos.
¡Los Sindicatos, organizaciones sociales y políticas, y luchadores de todos los sectores unidos bajo estas demandas para que la crisis la paguen los capitalistas y no nuestras familias!
Firman:
Sindicatos
Organizaciones sociales
Dirigentes